El cabello es una pieza esencial en nuestra imagen; tener un pelo fuerte, sano y bien cuidado mejora nuestra autoestima, y de igual forma, cuando detectamos que se cae más de lo habitual, perdemos parte de esa autoestima, y podemos llegar a sufrir depresiones por este motivo.
¡¡TENEMOS NO UNA, SINO TRES BUENAS NOTICIAS!!
La primera, que los diferentes tipos de alopecia, sea androgenética (calvicie común, que afecta a hombres y mujeres), o areata (pérdida de pelo formando “calvas”), o alopecia frontal fibrosante (más frecuente en mujeres, con caída “en diadema”), o de origen inflamatorio o infeccioso, tienen una forma de presentarse fácilmente reconocible por un tricólogo (dermatólogo especializado en alteraciones del pelo).
La segunda, que actualmente existen múltiples tratamientos para controlar la alopecia y frenar su avance, o conseguir el recrecimiento del pelo en algunos casos.
La tercera, (¡esta es la mejor!) que tenemos a tu disposición una Unidad de Tricología, en la cual un dermatólogo tricólogo realizará una exploración clínica de tu cabello, y con esto (y puede que alguna prueba más), te ofreceremos el tratamiento más adecuado para tu caso particular, teniendo en cuenta tu tipo de alopecia, la gravedad de la misma, tu estilo de vida y tus preferencias.
Como ves, hay muchas variables a tener en cuenta para que tu tratamiento sea sólo para ti, pero sea cual sea la modalidad elegida (lociones, comprimidos, infiltraciones) ten la seguridad de que únicamente te ofreceremos tratamientos con estudios clínicos serios que avalen su eficacia, porque cuando hablamos de alopecia, perder el tiempo supone perder el pelo.
¡Pide una cita en la Unidad de Tricología, y déjanos ayudarte a conservar y mejorar tu pelo!
También conocida como calvicie común, se define como una pérdida de cabello que va evolucionando de forma progresiva y lo hace siguiendo un patrón característico (afectará determinadas zonas del cuero cabelludo). Su aparición se debe a la combinación entre herencia ( la información que está en nuestros genes) y la acción de los andrógenos sobre el cuero cabelludo. Esta situación va generando el crecimiento de cabellos cada vez mas finos y superficiales hasta que cabelludo.
¿Cuál es la frecuencia de este tipo de alopecia?
Realmente es la causa más frecuente de alopecia, llegando a afectar al 50% de los varones a partir de los 50 años, y algo menos a las mujeres.
¿Por qué sucede?
Los pelos tienen fases de crecimiento (anagen) y fases de reposo y caída (catagen y telogen) que se van sucediendo de forma cíclica y en base a nuestra genética. En las personas genéticamente predispuestas los andrógenos ejercerán una acción sobre la raíz de los folículos pilosos que alterará este equilibrio. Cuando los andrógenos llegan al cuero cabelludo se transforman en dihidrotestosterona a raíz de la presencia de una enzima (la 5 alfa reductasa). Como la dihidrotestosterona tiene mayor acción hormonal sobre los folículos va dando lugar a esa miniaturización de los tallos pilosos.
Es por ello que la asociación de mayor concentración de 5 alfa reductasa asociada a una mayor sensibilidad genética a la dihidrotestosterona hace que en determinadas personas se alteren las proteinas encargadas del ciclo folicular haciendo que este cada vez sea más corto y generando tallos más finos.
¿Cómo se si padezco alopecia androgenética? ¿Cuándo debo consultar al especialista?
Ante una caída que va dando sensación de disminuir la densidad de pelo en cuero cabelludo, lo correcto sería acudir a consulta de tricología para ser valorado. Generalmente la exploración clínica especializada en la cual se busca la diferencia de diámetros de los tallos pilosos en las diferentes zonas del cuero cabelludo, asociado a otros datos clínicos suele ser suficiente para un diagnóstico inicial. Sin embargo, en ocasiones, puede ser necesaria una analítica de sangre o una biopsia para descartar otras causas de alopecia.
Hay que tener en cuenta que existen muchos grados de alopecia androgenética, desde uno inicial en que se observan los tallos miniaturizados y menos densidad de pelo, hasta la calvicie total. Con los tratamientos médicos (entiéndase sin incluir el trasplante capilar) se consigue frenar y mejorar la alopecia, pero no recrecer pelo donde ya se ha perdido por completo. Es por esto, que es recomendable acudir al especialista en el momento que empezamos a notar menor densidad, para ser valorados y decidir si es recomendable iniciar tratamiento preventivo.
¿Existe un tratamiento para la alopecia androgenética?
A día de hoy existen múltiples opciones terapéuticas en función del grado de alopecia. Lo ideal es la valoración por un especialista que adapte el tratamiento a nuestro caso concreto. Como opciones encontramos desde tratamientos que controlen la acción de las hormonas (espironolactona, finasteride, dutasteride), otros que mejoran la irrigación del cuero cabelludo (minoxidil, nanoxidil). Los complementos vitamínicos pueden ser de ayuda en función de los hábitos o déficits de cada paciente. La mesoterapia capilar (con medicamentos o con vitaminas) el plasma rico en plaquetas así como tratamientos con láser, se pueden asociar para mejorar los resultados.
Hay que tener en cuenta, que los tratamientos son a largo plazo, ya que la alopecia androgenética es progresiva y lo que conseguimos con ellos es frenar esa tendencia.
ALOPECIA AREATA
Este es el nombre de un tipo de alopecia, en la cual el cuerpo genera una inflamación dirigida al pelo y hace que se caiga. Puede afectar al pelo de cualquier parte del cuerpo, aunque lo más llamativo y conocido es que afecta al cuero cabelludo, barba, cejas y pestañas. No se conoce la causa exactamente, pero si se ha asociado su aparición con cuadros de estrés y enfermedad. Lo más frecuente es que de forma súbita aparezca una o varias calvas bien delimitadas, aunque en ocasiones puede llegar a afectar todo el cuero cabelludo (alopecia areata total) o todo el cuerpo (alopecia areata universal). En la mayoría de los casos se consigue la resolución del cuadro con el tratamiento adecuado.
Ante la observación de la caída de pelo en un área delimitada, debe acudir a su especialista tricólogo quien confirmará que se trate de una alopecia areata y no de otros tipos de alopecia más infrecuentes. Así mismo, suele ser interesante realizar un estudio para descartar que se asocie a algún otro cuadro sistémico. En ocasiones para ello, además de la visita en consulta pueden ser necesarias otras pruebas como la biopsia o una analítica de sangre.
A día de hoy, existen múltiples tratamientos para controlar la alopecia y ayudar a recrecer el pelo lo antes posible. Los corticoides son en general una base importante para el tratamiento ya que disminuyen la inflamación que causa la caída. En función de la gravedad se puede realizar el tratamiento bien aplicado tópicamente, por vía oral o mediante infiltraciones localizadas en consulta. En ocasiones se asocia o sustituye por otros tratamientos que lo que hacen es modificar la inflamación para que deje de atacar el pelo. El minoxidil, como ayuda para recrecer el pelo, puede sernos útil especialmente cuando ya ha desaparecido la inflamación.
Sabías que… hay un tipo de alopecia areata que solo afecta al pelo moreno? Es lo que le sucedió a Maria Antonieta el día antes de que le cortaran la cabeza, y por lo que de un día para otro el pelo se le tornó completamente cano.
ALOPECIA FRONTAL FIBROSANTE
La alopecia frontal fibrosante es un tipo de alopecia cada vez más frecuente que suele afectar a mujeres postmenopáusicas, aunque cada vez se observan más casos en mujeres más jóvenes e incluso en hombres.
Es un tipo de alopecia que consiste en la recesión de la línea de implantación del cabello a nivel frontotemporal, por lo que la frente se va haciendo progresivamente más ancha y también puede afectar al pelo de las cejas con bastante frecuencia e incuso a otras zonas del cuerpo.
Sabías que? La ausencia de pelo en las cejas puede ser debida a otras patologías además de la alopecia frontal fibrosante, como por ejemplo problemas tiroideos, alopecia areata o tricotilomanía (o hábito de arrancarse el pelo, la cual puede ser un síntoma de problemas psiquiátricos como depresión o ansiedad)
Es un tipo de alopecia cicatricial, esto significa que las personas que padecen este tipo de alopecia pierden los folículos pilosos, que son sustituidos por una cicatriz, por lo tanto, el cabello que se ha perdido, difícilmente vuelve a recuperarse, por eso es muy importante diagnosticarla temprano.
Generalmente el diagnóstico se puede realizar explorando al paciente, aunque hay casos en los que puede ser necesario que tu tricólogo te realice una biopsia del cuero cabelludo, sobre todo en los casos más iniciales donde a veces no está tan claro ese diagnóstico.
El objetivo del tratamiento de este tipo de alopecia consiste en frenar el proceso. Para ello existen diversos tipos de fármacos, entre los que se encuentran los corticoides que pueden ser administrados sobre el cuero cabelludo en forma de crema o de espuma e incluso inyectados en las zonas afectadas. Otro fármaco que puede ser aplicado de forma tópica es el minoxidil. También se pueden usar fármacos con acción hormonal, llamados antiandrógenos o fármacos que regulan el sistema inmunológico.
Es importante que tu tricólogo evalúe de forma personalizada qué tratamiento es el más adecuado para ti en caso de padecer este tipo de alopecia, así como que realice un seguimiento de tu proceso para evaluar si los tratamientos están siendo eficaces o es necesario un cambio de estrategia.